¿Libertad de expresión en Occidente?

En los últimos días hemos visto innumerables artículos en la prensa relativos al problema causado por el medio de comunicación danés "Jyllands-Posten", quien el 30 de septiembre pasado publicó 12 caricaturas del profeta Mahoma, las que fueron reproducidas por el medio noruego Magazinet el pasado 10 de enero de este año.

Las doce caricaturas de Mahoma que fueron publicadas por ese diario generaron una muy razonable ola de protestas en el mundo musulmán, pues la representación del profeta Mahoma está prohibida en el Islam.

Y tras haber comenzado esta la ola de protestas en los países musulmanes, otros medios de comunicación europeos repitieron las caricaturas en solidaridad con el periódico danés. Esto produjo un enardecimiento mayor del mundo musulmán, pues en uno de los dibujos aparece Mahoma vistiendo un turbante con forma de bomba con una mecha encendida.

Incluso el presidente alemán Horst Koehler dijo: "La violencia y las amenazas son algo que no se puede aceptar bajo ninguna circunstancia", refiriéndose al ataque de una horda a las embajadas de Dinamarca, Suecia y Chile.

El mismo mandatario recordó que la libertad de opinión es parte esencial de las democracias europeas. Aunque también, el jefe de estado alemán dijo que esa libertad implica también "responsabilidad y respeto a los otros y a sus sentimientos religiosos".

Dados los antecedentes del tema deseo dar inicio a mi exposición refiriéndome a la inconsecuencia de nosotros, los occidentales, con respecto al mundo musulmán.

Hablamos de libertad de expresión, pero nuestros medios encuentran ofensivo y de mal gusto algunos gestos que son condenados ferozmente por el poder económico de los países que nos "mandan" o que nos "insinúan" como debemos vivir...

Tenemos, como países occidentales, un doble estándar, pensamos que vivimos en democracias reales (si lo comparamos con los países de oriente medio), en cambio vivimos en una burbuja creyendo que somos libres para decir o hacer lo que se nos antoja sin consecuencias.

¿Acaso creen ustedes que aceptaríamos que medios de comunicación de oriente u oriente medio publicaran imágenes de Jesús o el Papa en actitudes poco decorosas o que, francamente aparezcan haciendo algo incorrecto a nuestras creencias?

Es posible que la represión de la iglesia católica o del poder de algún estado poderoso se deje caer con todo el peso sobre el responsable de una publicación similar.

Sin más, la falta de libertad de poder publicar fotografías de occidentales muertos en la última guerra en Irak, continúa por parte del "imperio" (léase USA). Pobre de aquel que rompa esta norma impuesta por "Tío SAM".

De hecho hasta en los países que son "el patio de atrás" de EE.UU. no se atreven a hacerlo. Nosotros mismos en Chile, siendo uno de los pocos países latinoamericanos que envió reporteros o corresponsales de guerra, no pudimos ver esa cara de la guerra... pues "papi lo había prohibido".

Es posible que nuestro democrático gobierno le tema a las represalias de "Tío SAM".

Tal vez deberemos aprender algo de árabe para informarnos de esa región del mundo, ya sea por la cadena Al Jazeera u otro medio similar.

"Tío SAM" niega la posibilidad de, siquiera, cuestionar el 11 de septiembre de 2001 en el Word Trade Center. Incluso -y lo dicen los medios árabes- niegan la posibilidad de pensar diferente, respecto al Holocausto que vivieron los judíos en la 2° Guerra Mundial.

De hecho ese es el punto que ahora están utilizando los países musulmanes.

Occidente defiende a brazo partido sus intereses... ¿Sus intereses?... ¿O intereses judíos?

No soy para nada un nazi o perseguidor de los hebreos, pero... ¿Acaso no es extraño que el conflicto israelí-palestino sea increíblemente a favor de Israel?.

La libertad de expresión, la verdadera libertad de expresión esta siendo basureada. Y el respeto que solicitamos a nuestras creencias es sólo para nosotros, los occidentales... pero no para los otros...

¿Será esto una forma de discriminación hacia ellos? ¿Tal vez los consideramos "un grado más abajo" en la escala humana?

La respuesta a lo que podríamos llegar la obtendremos en el film "El Planeta de los Simios".